Un, dos, tres, cua..
La tonada ha empezado.
Es un sólo de piano
Que no quiere parar.
Ambientes controlados
Sostienen el castillo de naipes.
Miro al espejo y estoy yo.
De fondo los escenarios de la vida
Pasando ante mis ojos.
Visiones de mundos ajenos
Que danzan poseídos
A su propia voluntad.
Inciertos todos son,
Los miro pasar.
Cierro los ojos
Y empiezo a cantar
Una canción de cuna
Que me haga soñar bonito
En las noches de insomnio.
Una canción quiero cantar
Que me permita estallar.
Me lanzo.
Soy como una moneda al aire
Que no puede dejar de girar.
Quisiera caer de una vez
Sobre una cálida colcha
Y recibir el abrigo lento
De las fibras sobre el metal.
Pero divago entre Newton,
Una piedra y una pluma.
Me quedo suspendida,
Inerte en el instante
De gravedad cero,
Me quedo sin mi.
Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.