Aunque parezca de locos

La razón  de tu vida en la mía,

Es mucho más que mera coincidencia,

Debes saber que cuando me conecto al cielo,

Tu voz es la que me responde,

Es por eso que me gusta mirarte.

Es por eso que leo las palabras escritas sobre tu piedra.

Me causa curiosidad el misterio,

Porque se esconde entre los pliegues del universo,

Es una ecuación aún sin resolver,

Menudo problema para los egos de la ingeniería.

Parece haber muchos mundos paralelos,

Coexistiendo deliberadamente,

Las probabilidades son infinitas,

Cada mundo es un medio y un fin en sí mismo.

La conexión parece ser un lazo dorado,

Atado con rigor en mi vientre,

Es algo que no se me permite soltar,

Tiene un empalme vital en mi centro,

Que por años no he podido desaparecer,

Y parece perderse entre los mundos,

Pero las vidas se ponen una frente a la otra,

Era tras era, vida tras vida.

Hasta que lo evitable ya no lo sea más.

Porque la voluntad y la fuerza deben prevalecer.

La valentía tiene que ser costumbre,

Para decir lo que no se ha dicho,

Para hacer lo que no se ha hecho,

Para elevar conciencias irresolutas,

Para que este mundo pueda seguir siendo.

Esa es la misión.